El Complejo Asistencial Hermanas Hospitalarias Málaga ha abierto una unidad que acogerá un plan individualizado para asistir a personas con patologías mentales en el ámbito de la pandemia por Covid-19. Una unidad donde se diagnostican y se tratan ambas afecciones.
Se trata de una nueva unidad que conlleva un modelo de atención donde se combina la asistencia de la patología mental, con el diagnóstico y la asistencia en caso de infección por COVID-19 y su repercusión en la salud mental. El objetivo principal es la atención especializada a las personas que han quedado en un estado de fragilidad y vulnerabilidad y sobre todo en evitar que otras personas alcancen ese estado.
Un equipo multidisciplinar de especialistas establece un circuito que desde el primer momento va a atender tanto la patología mental como la posible infección por coronavirus en caso de que la hubiera. La atención se inicia con el estudio o confirmación de la infección por COVID con pruebas diagnósticas (test rápidos y PCR), pasando el paciente a una zona exclusiva sin COVID en caso de descartarse.
Contará con habitaciones de aislamiento equipadas con material audiovisual para asegurar el contacto con terapeutas y familias que intervengan en su recuperación, así como la posibilidad de estar acompañados la mayor parte del día (siempre con el equipamiento de protección necesario).
Durante todo el proceso se tratará en paralelo la afección mental que tenga asociada la persona, quedando así un modelo de intervención individualizado que abordará tanto los síntomas agudos derivados de la enfermedad mental como el tratamiento para el COVID-19.
Tipo de pacientes atendidos
La apertura de la nueva unidad pretender ofrecer asistencia a personas sin patologías mentales previas que como consecuencia de la situación de pandemia Covid-19, el miedo al contagio o por las vivencias durante el confinamiento, precisan atención especializada. Personas que presentan sintomatología mental, como duelos complicados, estrés post- traumático, ideas de suicidio, etcétera. También a pacientes con demencias, patología dual u otra patología previa que se ha agravado por la situación actual de pandemia. Y por supuesto al perfil habitual de los pacientes del centro, cuadros agudos o reagudizados de personas con enfermedad mental grave o con discapacidad intelectual.
Este modelo es el resultado de la experiencia previa en este tiempo de pandemia tras reevaluar los protocolos y guías de actuación ejecutados. Por lo que quedan garantizados los circuitos establecidos y el éxito de un tratamiento eficaz para poder hacer frente a la nueva realidad.