El programa 'InRed: conectando vidas', de la Fundación Purísima Concepción Hermanas Hospitalarias continúa con su objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad y alcanzar la necesaria conciliación de sus familias. Por ello, pone en marcha nuevas iniciativas con las que completar los servicios que ofrece. Un programa que ha aumentado este año el número de familias atendidas, que supera ya las cincuenta. Además de los servicios de logopedia, fisioterapia, psicología y pedagogía, se han incluido la terapia ocupacional, terapia de integración sensorial y las sesiones a domicilio, que el pasado año sólo se desarrollaban en los centros de esta Fundación. «Se trata de sesiones individualizadas de 45 minutos», explica Elisabet Peinado, responsable de estos servicios especializados. La principal apuesta de este proyecto y de este servicio «es la conciliación, intentando siempre amoldarnos lo máximo posible al horario de las familias, a sus necesidades y actividades. También hacemos equipo y tenemos mucha comunicación con otros compañeros y profesionales, en el caso de que el niño esté en otro colegio, gabinete o en un centro distinto de la Fundación. Estamos abiertos, igualmente, a que cualquier persona que lo solicite reciba estos servicios, porque no sólo están dirigidos a miembros de nuestra Fundación».

La disponibilidad de estos servicios, desarrollados por un equipo de siete profesionales, es de lunes a viernes en horario de tardes. Al tratarse de un servicio abierto y flexible durante todo el año, que puede demandar cualquier persona, el volumen de los usuarios e interesados y el número de profesionales puede variar en atención a las necesidades que vayan surgiendo. De hecho, algunos de los usuarios compaginan dos o tres de estos servicios, como fisioterapia o logopedia.

Mejoría en menor tiempo

Gracias a ellos, las familias han experimentado un cambio positivo en sus vidas. «Las que han hablado conmigo están muy contentas. Muchas de ellas han notado mejoría en menor tiempo. Al final, cuando trabajamos de forma conjunta en un mismo espacio, nos volcamos todos para que vayamos a una. Eso facilita la comunicación, el contacto con la familia y que el crecimiento sea mucho mayor y más rápido. Como dice el lema, 'Juntos somos más'. Todos trabajamos en un mismo sentido, con una misma misión y visión del cómo acompañamos a las personas y familias.

En el caso de que los usuarios estén por la mañana en los propios centros de la Fundación, «compartimos esa información y enfoque para trabajar en la misma línea o en distintas necesidades, haciendo partícipes también a las familias».

Elisabet se muestra feliz por los resultados tan positivos de este proyecto, que les trasladan los usuarios, familias y profesionales. Todo un logro «teniendo en cuenta que lo empezamos el año pasado y era algo que no habíamos hecho antes».